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El alcoholismo una enfermedad invisible

Seguramente bebas alcohol cuando te reúnes con tus amigos/as o familiares, y en acontecimientos importantes. Lo normal entre la población es beber en reuniones sociales y de manera esporádica, por lo que no se convierte en una adicción. En cambio, hay personas que suelen beber a menudo incluso estando a solas, en estos casos, el alcohol se puede convertir en una enfermedad invisible para el resto de personas, ya que es una droga legal que esta socialmente aceptada, pero para la persona que se vuelve un adicto puede ser un infierno.

Causas del Alcoholismo

La adicción al alcohol es un trastorno complejo y puede ser causado por una combinación de diversos factores biológicos, psicológicos y sociales:

  1. Factores genéticos: Existe evidencia de que ciertos genes pueden aumentar la vulnerabilidad de una persona a desarrollar adicción al alcohol.
  2. Factores biológicos: El alcohol puede tener efectos directos sobre el cerebro y los sistemas de recompensa.
  3. Factores psicológicos: Algunas personas pueden recurrir al alcohol como una forma de afrontar el estrés, la ansiedad, la depresión u otros problemas emocionales.
  4. Influencias ambientales: El entorno en el que una persona crece y se desarrolla puede desempeñar un papel importante en la adicción al alcohol.
  5. Presión de grupo: La influencia de amigos o compañeros puede ser un factor contribuyente en el consumo excesivo de alcohol.
  6. Trauma y experiencias pasadas: Las personas que han experimentado traumas o eventos estresantes en sus vidas pueden tener un mayor riesgo de desarrollar adicción al alcohol.

Muchas personas, sobre todo los más jóvenes no ven el peligro del alcoholismo a largo plazo, ya que se puede convertir en una adicción e incluso te puede llegar a provocar una enfermedad en el hígado por exceso de alcohol. Entre los riesgos que tiene el alcoholismo podemos destacar los siguientes:

  1. Problemas de salud física: El consumo excesivo de alcohol puede graves problemas de salud, que incluyen daño hepático, enfermedades cardiovasculares, pancreatitis, etc.
  2. Dependencia y síndrome de abstinencia: Una persona adicta al alcohol puede experimentar síntomas de abstinencia como temblores, sudoración, ansiedad, irritabilidad, etc.
  3. Problemas de salud mental: El alcoholismo está asociado con un mayor riesgo de desarrollar trastornos mentales, como la depresión o la ansiedad.
  4. Riesgos en la conducción: El consumo de alcohol afecta negativamente las habilidades cognitivas y motoras, lo que aumenta el riesgo de accidentes de tráfico.
  5. Problemas legales: Las personas con problemas de alcoholismo también pueden enfrentar consecuencias legales, como arrestos por conducir en estado de ebriedad, peleas o disturbios públicos

¿El alcoholismo se puede curar?

Aunque creas que no, sÍ que se puede. Existen centros de desintoxicación como revitas, que cuentan con un programa completo en el que las personas adictas al alcohol pueden conseguir curarse y tener una vida normal como el resto de personas.

Cuentan con un centro de investigación y formación, junto a un equipo de profesionales especialistas en adicciones, les ha permitido desarrollar unos programas de desintoxicación con alta tasa de éxito. El equipo de revitas determinará el tratamiento más apropiado para cada persona y diseñará una terapia de rehabilitación personalizada para conseguir eliminar totalmente la adicción a la bebida.